FORMA parte de las filiales de los Pumas de la UNAM, y al igual que el resto de ellas, se enfoca principalmente en la formación de jóvenes talentos, aunque sin duda alguna, su mayor virtud, la cual la hace especial, es que a diferencia de los males del futbol mexicano, privilegia lo deportivo sobre lo económico.
Impulsado por algunos jugadores del primer equipo, quienes fueron sus compañeros, y apoyado por su hermano Luis, Raúl Santillán instituyó una escuela de futbol en el Municipio de Tecámac, Estado de México, en la que además de una formación deportiva, se resaltan los valores morales y la unión familiar.
"Ven y únete a esta gran familia", es la expresión con la que Raúl y Luis invitan a niños y niñas a experimentar los beneficios de una vida sana que, en combinación con los estudios académicos, cimienta no sólo el futuro de nuestro futbol, sino del país.
"La invitación está abierta, no importa la condición económica", pues aseguran que lo único que se necesita es tener el deseo de perseguir y alcanzar un sueño, ya que aunque tiene mensualidades accesibles, apoyan a niños de bajos recursos, quienes no podían divertirse sanamente hasta antes de la creación de esta escuela.
Su bondad es tal, que se ve beneficiada por sí sola.
La escuela de los hermanos Santillán hace que los jugadores que hoy militan en la Primera División recuerden su pasado, cuando la ilusión de destacar en el futbol mexicano los llevó a tocar puertas en busca de una oportunidad.
Marco Antonio Palacios, Efraín Juárez, Israel Castro, de Pumas; David Toledo, de Tigres, y Gerardo Galindo, actual campeón del futbol mexicano con Monterrey, son sólo algunos de los jugadores que han auxiliado a esta escuela con su apoyo incondicional y admiración por lo que se hace en beneficio de la juventud del municipio.
Dentro de los programas de Pumas Tecámac, destacan la visita a las instalaciones de las fuerzas básicas, así como del primer equipo, además de los diferentes torneos, en los cuales poco a poco se han ganado el respeto de otras escuelas que, a diferencia de ésta, cuentan con los recursos necesarios para el traslado de los equipos y todos los gastos que implica visitar a los adversarios que se encuentran fuera del municipio.
La solución para mejorar los recursos, y por ende, las atenciones de la escuela, sería fácil: bastaría con el incremento de sus mensualidades, pero para Raúl es algo que no está a consideración, y es por ello que se ha dado a la tarea de tocar puertas en busca de una audiencia con el presidente del Municipio, a quien quiere invitar a que se una a esta gran familia y pueda ayudar de alguna forma, principalmente a los niños que no cuentan con los recursos necesarios para labrarse un mejor porvenir dentro del deporte, lo que la sociedad misma devolverá agradecida.
Actualmente, Pumas Tecámac participa en torneos y competencias de alto nivel futbolístico, como el torneo Proyección 2000, en el cual participan escuelas como el Colo Colo, dirigida por Osvaldo Castro, el "Pata Bendita"; Pumas Satélite y varias escuelas más, formadas por ex jugadores profesionales.
Además del torneo local, llamado Copa Tecámac, han participado en diferentes estados como Puebla, Guanajuato y Pachuca, entre otros.
FUTURAS PROMESAS
Su constancia diaria, su ilusión de trascender, ha hecho que alumnos como José Valdés, Diego Sánchez, Víctor Cuevas y Miguel Ángel Mora, sean considerados como jugadores con las suficientes cualidades como para que, en un futuro, formen parte de las fuerzas básicas del Primer Equipo, instancia a la que ya han llegado los jóvenes Ángel Pereyra, así como Marco y Miguel Castillo, quienes se encuentran a prueba en la categoría 96, bajo la dirección del profesor Salvador Ruiz.
Comprometido y agradecido por el apoyo recibido por parte del club, Raúl Santillán ha puesto especial interés en darle seguimiento a las necesidades del Primer Equipo, ya que la directiva, encabezada por el licenciado Víctor Mahbub, ha decidido no reforzarlo con jugadores que no hayan salido de la cantera universitaria, a la cual planean darle todo el apoyo necesario, lo que sin duda, representa una gran oportunidad para los jóvenes que sueñan con convertirse en el futuro de nuestro futbol.
Propiciar que el talento mexicano nutra de opciones a los equipos y a la Selección Nacional, así como disminuir la contratación excesiva de extranjeros, que en algunos casos no han llegado a trascender, serían los primeros efectos de darle más importancia a lo deportivo que a lo económico, y Pumas Tecámac está en el camino.
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